De la invertebración crónica de España
Hace varios años abordé la tarea de leer “El Espectador” de José Ortega y Gasset. Me aburrí casi tanto como con Rayuela (gafapastas rásguense las vestiduras aquí, por favor), el resultado fue el mismo. A día de hoy son los únicos dos libros que he empezado en mi vida y no he podido terminar. Algún día los retomaré, no abandonen todavía este post.
La semana pasada, disfrutando de unos días de vacaciones por Escocia, concretamente paseando por Edimburgo con mi vecino y amigo Nacho, me di el placer de comprar un ejemplar de “La España invertebrada” de José Ortega y Gasset. Era el único titulo en español en la tienda de caridad de Oxfam, y a decir verdad el único que me llamo la atención. Al módico precio de 1.99 libras esterlinas, el asunto me parecía lo suficientemente interesante como para dejar de comprarlo.
La manifestación en Cataluña el pasado 11 de septiembre me dejó mal cuerpo. La explicación que mi limitado intelecto y escaso conocimiento del asunto habían encontrado a los nacionalismos catalán y vasco siempre se había caracterizado por culpabilizar a la Transición y posteriores gobiernos, que en mi opinión habían hecho demasiadas concesiones a las diferentes administraciones regionales. Educación y sanidad (sobre todo la primera) nunca deberían haberse transferido. Todavía sigo pensándolo, pero aunque ya casi dos generaciones han sido educadas bajo programas nacionalistas en diferentes regiones de España, esto por si solo no explica el fuerte proceso de perdida de identidad nacional y desvertebración que existe en nuestro país.
Este tipo de problemas no se explican si no se mira hacia atrás en el tiempo, a veces muy atrás, por lo que conocer la visión sobre el tema del más ponderado filósofo español del siglo XX me parecía que sería no sólo ilustrativo sino obligado. No entraré en análisis de la obra, pues tratar de condensar el mensaje que contiene en estas escasas y torpes líneas lo desvirtuaría. Además, ya hay quien lo ha hecho de manera bastante certera. Pero si te interesa el tema, y debería interesarte si tu DNI es español (independientemente de lo que te sientas), no dejes de leerlo.
Los veinte minutos que me ha llevado el trayecto del metro londinense entre las estaciones de Oval y Bond Street hoy han sido una autentica delicia disfrutando del capitulo llamado “Particularismo” (ve a la pagina 35). Por él, y por el resto del ensayo, muchas gracias, sr. Ortega y Gasset.
September 25, 2012 4 comentarios