No recuerdo a través de quién, he llegado al blog oficial del Día de Acción del Blog, que por lo visto es una iniciativa que se estrenó el año pasado, por la que se propone a los blogs, podcast y videocast que lo deseen que hagan alguna reseña sobre un problema concreto que atañe a la población mundial. El año pasado fue el medio ambiente, este año, la pobreza.

Antes de sentarme, le pregunté al oráculo. La verdad es que la cantidad de datos al respecto es impresionante. Los datos en si son aterradores.

Sinceramente, creo que cualquier cosa que pueda decir se quedará corta. Normalmente no me sumo a este tipo de iniciativas, porque no suelo verles utilidad. A todo el mundo le parece deleznable y triste que ahora mismo haya gente que no tenga nada que llevarse a la boca. Parece imposible que hoy día haya cientos de personas (¿miles?) que mueren a diario de hambre. Pero no es imposible. Es posible. Y tanto. Está pasando. Ahora.

La pobreza es una situación o forma de vida que surge como producto de la imposibilidad de acceso y/o carencia de los recursos para satisfacer las necesidades físicas y psíquicas básicas humanas que inciden en un deterioro del nivel y calidad de vida de las personas, tales como la alimentación, la vivienda, la educación, la asistencia sanitaria o el acceso al agua potable. También se suelen considerar la falta de medios para poder acceder a tales recursos, como el desempleo, la falta de ingresos o un nivel bajo de los mismos. También puede ser el resultado de procesos de segregación social. (Wikipedia).

Bien. Ya hemos tenido el momento de sensibilidad que nos ha hecho sentirnos orgullosos de nosotros mismos por un momento. Seguimos vivos, experimentamos la compasión. Qué grande. Me he removido. No soy una persona superficial.

Seguramente antes de una semana hayamos gastado unos 200 euros (cualquier mortal adulto y trabajador en nuestra España de hoy día) entre comida, ropa, transporte, vicios variados, etc… algo más de 200 euros era el salario medio mensual en Rumanía cuando yo llegué allí, en octubre de 2005. Octubre de 2005. Rumanía, sí, ese país que está en el puesto 88 en esta lista. La lista de PIB per cápita de todos los países del mundo. Unos 225.

En 28 países del mundo, más del 50% de sus habitantes vive por debajo del umbral de la pobreza. En 90 países, más del 25% de la población. Escalofriante. Hay que puntualizar sobre el denominado umbral de la pobreza: “Las estimaciones nacionales del porcentaje de la población que viven por debajo del nivel de pobreza se basan en encuestas de sub-grupos, con los resultados ponderados por el número de personas en cada grupo. Las definiciones de pobreza varían considerablemente entre las naciones. Por ejemplo, las naciones ricas generalmente emplean normas más generosas de pobreza que las naciones pobres.” (según datos de la CIA, a día 1 de enero de 2008).

Bien, ya nos hemos sentido culpables, luego aliviados por ello (no somos unos monstruos), y luego otra vez culpables porque los datos son demoledores.

¿Y qué quieres que haga?. Si esto tuviera fácil solución, se haría y fuera; a nadie le gusta esta situación. Sinceramente, no se me ocurre qué se puede hacer al respecto, ¿qué puedo hacer yo?. Apadrinar a un niño, donar dinero a fundaciones, etc… es una opción, pero a fin de cuentas son pan para hoy y hambre para mañana. Los problemas de los países del Tercer Mundo son estructurales, de sus economías, de cómo está montado el mundo.

Casi cualquiera de nosotros podríamos firmar el anterior párrafo. Disculpad el intento de inmersión en vuestras mentes, pero no creo que nadie tenga muchas objeciones a esta forma de discurrir. ¿O sí?. ¿Podrías comentarlas?.