Posts from — October 2008
Meme de la felicidad
Recojo el guante que me envÃa el Pollo Matutino y trataré de dejar constancia de seis cosas que me hacen feliz. Sólo una puntualización, es tarde y estoy cansado, no necesariamente estas seis cosas son las que más me hacen feliz, ni están ordenadas por importancia ni nada parecido. Gracias.
1.- Que gane el Sevilla FC, y si puede ser dando espectáculo pues mejor. Al fútbol, al fútbol femenino, los equipos de fútbol base, el bólido de la Superleague Fórmula del Sevilla FC, el Sevilla FC de Bayamón, las peñas sevillistas que tengan equipos de fútbol, o hasta de petanca. Me da igual. Todo lo que lleve ese escudo tiene que ganar, y cuando lo hace, es un motivo de alegrÃa para mi.
2.- Cuando mi padre o mi madre fijan sus ojos en mi y puedo leer alegrÃa en sus miradas.
3.- Una larga conversación con algunos amigos, de esas en las que miras y te miran a los ojos y un poco más allá, y sales renovado y con nuevos propósitos.
4.- Conocer a alguien que remueva mis cimientos en dos dÃas, removiendo yo los suyos. Al final pasa el tornado y las casas siguen en su sitio y con todo en orden, pero esos momentos de caos no los cambiarÃa por nada en el mundo.
5.- Una larga jornada de trabajo productivo. La experimento tan raramente, que cuando ocurre es bastante gratificante.
6.- Un dÃa lluvioso, con un buen cargamento de pelÃculas paranoicas para ver, clásicos para leer, comida en condiciones, la casa calentita, buena compañÃa y ninguna obligación de levantarse o acostarse tempranito.
Le paso el meme a quien lo quiera recoger. Que tengáis un dÃa genial.
October 2, 2008 11 comentarios
Motorizado por Madrid
Hace nueve años mi padre me compró una moto y me dijo: “cuÃdala, que te tiene que durar hasta que termines la carrera”. Me lo tomé a pecho y al final me ha durado hasta terminar “dos” (la técnica y la superior). Si el otro dÃa comentaba que me encanta conducir, no me referÃa sólamente a coches o furgonetas. Ir en moto por una ciudad desconocida, sin prisa, sin pausa, es para mi un gran placer. O, mejor aún, por una ciudad conocida parcialmente.
Hace poco tuve la ocasión de viajar a Barcelona a un workshop de Php, y de paso visitar a varios amiguetes. La chica en cuya casa me hospedé, una amiga que vivió durante un tiempo en Sevilla, me prestó su moto mientras ella trabajaba, y estuve un dÃa entero (hizo un dÃa magnÃfico, por cierto) por Barcelona paseando en su moto.
Anoche saqué mi moto del garaje en el que la habÃa dejado con la ayuda de Gons al llegar a Madrid, y me dirigà con ella a la parada de metro de Iglesia. Iba a cenar con una amiga y su compi de piso. No miré ningún mapa. QuerÃa saber hasta dónde llegaba mi conocimiento de la ciudad después de vivir en ella trece meses, patearla (al menos el centro) y moverme en metro.
Lo que me ocurrió tanto en Barcelona como en Madrid fue simple y llanamente que casi se me saltaron los lagrimones al darme cuenta de lo fácil y rápido que es moverse en moto por una y otra. Ayer tardé desde mi casa hasta el lugar donde dentro de 64 minutos comienzo a trabajar sólo 14. Como me sobraba algo de tiempo para llegar a la cena, comencé a explorar un poco y a conectar plazas, avenidas, calles… lugares que antes sólo eran paradas de metro cobraron vida ante mis ojos, y aquellos que conocÃa como islas pasaron a formar parte de un todo. Un todo por el que me movà como pez en el agua y en el que me sentà muy cómodo circulando. No sé si me estoy dejando llevar por el hecho de que anoche prácticamente no habÃa tráfico por Madrid cuando cogà la moto. En unos dÃas podré confirmar o no las primeras sensaciones, que han sido inmejorables. Creo que ha sido un enorme acierto traerme la moto desde Sevilla. Espero no romperme las piernas o algo peor, y terminar pensando de forma diferente.
October 1, 2008 9 comentarios