A partir del primero de octubre.

¿Cómo soy, para convivir?: un tío tranquilo, respetuoso, no fumador, heterosesuá, escrupuloso pagador, un poquito cocinillas, remolón (pero cumplidor) a la hora de fregar. No me veréis por el salón para ver la tele, sí para charlar un rato, no tengo mascotas, no soy sonámbulo, y no me meto en tu vida si no me pides opinión acerca de cualquier cuestión.

¿Qué busco en un piso?: fundamentalmente dos cosas: silencio a partir de las 0:00 de domingo a jueves y wifi para todos (es decir, que no haya nadie chupando todo el ancho de banda mientras se descarga lo más grande). No es imprescindible, pero estaría bien, que la habitación tuviera cama doble (es que me muevo cuando duermo), mesa y vistas al mar.

Zona: en principio cualquiera, si bien estaría predispuesto a aceptar ofertas por el centro o la zona norte de la capital.