Las recetas de Villú: Pulpo a la gallega
También conocido como pulpo a feira.
Compras el pulpo fresco en el mercado. Lo congelas durante veinticuatro horas como mínimo, para que se relajen los tendones y nervios durante la congelación, de cara a su mayor ternura a la hora de ser consumido. Lo tienes que sacar del congelador ocho horas antes, dejándolo reposar y descongelar a su amor.
Ocho horas después, pones en una olla 0,75 litros de agua con sal y una hojita (o dos o tres, vamos) de laurel. Es muy importante introducir el corcho de una botella de tinto, para que se enternezca aún más. Pones el fuego a potencia máxima, y cuando esté hirviendo el agua, debes asustar al pulpo dos veces (meterlo casi entero en el agua hirviendo cogiéndolo por la cabeza, teniendo cuidado con no quemarte) durante varios segundos cada vez. A la tercera, dejarlo dentro durante media horita si se trata de una olla express, o al menos una hora si es una normal. El fuego a un sesenta por ciento de su potencia, aproximadamente.
Saca el pulpo pasado este tiempo, o cuando lo notes blandito (ayúdate de un tenedor, no metas el dedo en el agua).
Tras sacar el pulpo (y dejarlo escurriendo), en el agua resultante, ahora de nuevo con la potencia al máximo, y cuando comience a hervir, agrega tantas patatas peladas y cortadas a grandes cascos como comensales haya a tu mesa. Déjalas durante siete minutos en olla express o unos catorce en una normal. Cuando las notes blanditas (recuerda, usa el tenedor), sácalas y prueba una: en el caldo moradito del pulpo, las patatas toman un sabor exquisito.
Mientras las patatas están en la olla, tenemos que trocear el pulpo en porciones de tamaño a gusto del consumidor, aunque se suelen cortar de un cm de grosor, aproximadamente (esto lo dice la Wikipedia, no mi madre).
Desperdigamos estos trozos por una fuente de madera, sobre una base formada por los cascos de patatas hervidas mientras cortabas el pulpo (¿has visto?, eficiencia en la cocina). Es importante escurrir bien las patatas antes de formar con ellas la base sobre la que aposentarás el pulpo troceado.
Al conjunto se le añade aceitito de oliva y pimentón.
Intenta servirlo mientras esté todavía caliente.
Enjoy your meal!
10 comments
Mmmm el leer la receta sería una buena excusa para hacer ya pulpito 😀 aunque no sé yo si me quedaría como una piedra….una cosa que si que me ha quedado del todo clara…es el de no meter el dedo en la olla y si el tenedor. ¡Vivan los tenedores!
Que precisión ! . No sabia lo del tapón de corcho de vino tinto. Lo haré. Sobre el corte la Villé lleva razón. A mi me gusta mas delgadito , pero a otros amigos mas gordito. No hay reglas , porque esta bueno como lo pongas. Albariño bien frio y a disfrutar. Que hambreeeee, Dios mio !
Aceitito de oliva, pimentón (dulce o picante, al gusto) y sal gorda, que no se nos olvide la sal gorda.
Y otro detalle para groumets: hay quien, además del corcho, mete en la olla una barra de cobre (~1 cm de diámetro y unos 5 o 6 de largo), para darle el gusto de esos calderos enormes de cobre, claro, en lo que se suele preparar en la ferias.
¡Buen provecho!
Jamas en mi vida habia oido lo del corcho…que caña!!
Yo, excepto el pimenton (por alergica) se lo pongo todo. 🙂
En fin, ahora lo bueno va a ser encontrar un pulpo por estas tierras que no me cueste un ojo de la cara.. 🙁
Y si el pulpo puede ser de las rías gallegas, mejor que mejor; el de aguas africanas deja mucho que desear.
Una cosa curiosa, el mejor pulpo a la gallega se come en el interior de Galicia, provincia de Ourense, concretamente. Cosas del tipo de agua, parece ser.
@Ivich: para eso no hacen falta excusas, sólo hambre y ganas :). ¡Vivan, sí, los tenedoressssssssss!.
@Antonio: son las 12:15 cuando escribo esta respuesta, y si te digo la verdad también estoy muerto de hambre. La sugerencia de albariño que haces no contribuye a disminuirla precisamente…
@Vanya: gracias, igualmente. Lo del cobre también lo había leído por ahí, es curioso. Pero vamos, que lo del corcho tampoco es que sea muy normal.
@Elenita: en Dublín pasa lo mismo, pescado escaso, malo y caro (para cocinar, que en los restaurantes puedes tener suerte).
@Xoubinha: Galicia oeoeoeoeoe, África buuuuuuuuu (para comer pulpo). Ourense también merece algún privilegio :).
Me encanta el pulpo, me encantaaaaaaaaa!! Oh que hambre! xD
Al igual que Ivich… lo de “ayúdate de un tenedor, no metas el dedo en el agua” me ha ENCANTADO!!! 🙂
Estos “pequeños” detalles son los que hacen de un libro de cocina que sean un GRAAAAN libro!!! 🙂
Me gusta tu estilo, chaval, un abrazo
El truquito del corcho lo oí en un programa de cocina, qué curioso. Me lo apunto para la próxima, 🙂